te veo y te recuerdo lamida por un can,
desde la sombra de mis deseos crepitantes, tu
cuerpo yace fragil sobre las sabanas temprano conquistadas;
y el humo verde q dibuja etereas carcajadas, te convierte
en el hada q me alienta al pecado mientras mi ser
construido de simbolos, esquiva con dolor
el convite;
hoy te veo, pero no escucho los agudos de tus palabras
q devolvian el sentido a mis dias grises;
hoy quisiera olvidarte, y enterrar mi lujuria q aun no
revoco ni prescribe;
ahora eres tan solo pensamiento incrustado en mi piel,
llaga invisible instalada como una estrella,
en el desierto cercano al oasis
de tu dulce entraña
desde la sombra de mis deseos crepitantes, tu
cuerpo yace fragil sobre las sabanas temprano conquistadas;
y el humo verde q dibuja etereas carcajadas, te convierte
en el hada q me alienta al pecado mientras mi ser
construido de simbolos, esquiva con dolor
el convite;
hoy te veo, pero no escucho los agudos de tus palabras
q devolvian el sentido a mis dias grises;
hoy quisiera olvidarte, y enterrar mi lujuria q aun no
revoco ni prescribe;
ahora eres tan solo pensamiento incrustado en mi piel,
llaga invisible instalada como una estrella,
en el desierto cercano al oasis
de tu dulce entraña